Las ceremonias, los rituales intentan subrayar momentos en el tiempo. En muchas empresas la formulación de un presupuesto es un puro ejercicio aritmético en el cual se dice cuánto se va a vender, cuánto se va a gastar y cuánto se espera ganar. Si le diéramos más importancia a las premisas en las cuales está basado el presupuesto, si reflexionáramos sobre los esfuerzos y sobre el esmero requeridos para cumplir las metas propuestas, estaríamos levantando y concentrando el nivel de energía para la gestión del año que viene.
Cuando se hace a una persona una despedida de soltera, se le está señalando que está a punto de iniciar un tramo muy distinto de su vida.Es como si la reflexión y los afectos detuvieran el tiempo y concentraran energía psicológica en lo que empieza. Los caballeros medioevales velaban las armas. La víspera de ser armados caballeros pasaban la noche en oración y meditación frente a las armas con las cuales iban a emprender una nueva etapa de su vida. Me parece que lo mismo hacen los niños que van a iniciar la escuela, cuando muestran a sus parientes y amigos adultos el “bulto” en el que tienen preparados los instrumentos de su nueva vida.
Las graduaciones, son vistas como final de una etapa y de esa manera podrían conducir el conformismo. Podrían ser vistas más bien, como el inicio de una etapa . Una graduación colegial podría ser vista como la ceremonia en la cual se inicia la vida universitaria. Y el alcance de una licenciatura podría ser interpretado como la adquisición de una licencia paraseguir transitando autónomamente, ya sin profesores y sin exámenes, por el camino del aprendizaje permanente. A los barcos se los bautiza con la explosión de una botella de champaña antes de hacerlos deslizarse hacia el mar.
En el lejano Norte, en Noruega, se tiene la costumbre de obsequiarle provisiones a quienes van a emprender un viaje. En esas latitudes, todo viaje es riesgoso porque el ambiente tiene condiciones extremas, especialmente en invierno. Así, para que todos sobrevivan, lo cual es la mayor motivación para todo grupo social, se ha consagrado en esa costumbre la práctica de ser solidarios con quien emprende un viaje. Y en un ejercicio de extensión de la buena práctica a otros ámbitos de la vida,también se le dan provisiones y aliento a quien emprende por ejemplo un período de exámenes. Me gusta pensar en el acopio de fuerzas que hace la persona que se enfrenta a una tarea difícil, cuando los amigos vienen a presentarle de esa manera su apoyo y su buen augurio.
En los esfuerzos de cambio, es conveniente que sus líderes den el banderazo de salida. Para que se sienta que los esfuerzos que se está haciendo tienen un objetivo común. Para que todos los que van a ir enfrentando las dificultades propias del abandono de viejas prácticas y de la incorporación de nuevas formas de hacer las cosas, no se sientan luchando en soledad sino que sientanque en otros puntos de la organización, otras personas tambiénenfrentan circunstancias semejantes. Esa conciencia de no estar solos en la lucha, sirve de estímulo, de consuelo y de apoyo.
Las fiestas de fin de año en las empresas pueden ser una simple ocasión de comer y beber. O podrían aprovecharse para revisar los resultados del año que termina. Pero mucho mejor, podrían ser una ceremonia para levantar el entusiasmo, velar las armas, preparar las herramientas para lanzarse a la conquista de las metas que se tiene para el año entrante. No está mal lo de comer y beber juntos. Los griegos llamaban con el bonito nombre de simposio a una reunión en la cual se bebía y se conversaba inteligentemente. Agregar esa reflexión inteligente podría redimir a la simple francachela.